El milagro del bebé que pesó menos de 300 gramos
Un bebé que pesó menos de 300 gramos cuando nació y que tenía escasísimas posibilidades de vida fue dado de alta hace apenas horas y goza de buen estado de salud. De esta manera, Kimberly Mueller se convirtió en la pequeña más chiquita del mundo que logró sobrevivir (para ver las fotos haga click en ver más imágenes).Según cuenta el portal Daily Mail, Kimberly no podía ni siquiera llorar y tenía menos de una chance en mil de seguir con vida. Pero luego de seis meses de cuidados intensivos, engordó más de dos kilos y fue dada de alta.El vocero de la Universidad Clinic, de Goettingen, dijo: “Ella no es nada menos que una sensación médica”.Oliver Moeller, el especialista del corazón que atendió a Kimberly, manifestó: “Bebés tan pequeños como este no suelen tener muchas posibilidades”.“Tenemos mucha suerte de que esté viva. Nunca habíamos vivido un caso igual”, añadió.Además reveló que la bebita ya muestra reflejos básicos como agarrar con la mano y que puede llevar una vida normal.Su padre, Andreas, declaró: “No podía creer que me dejaron verla por un par de segundos después del nacimiento. Ella era tan chiquita. Yo le grité: ‘Vamos Kimberly, vas a hacerlo’”.
Un bebé que pesó menos de 300 gramos cuando nació y que tenía escasísimas posibilidades de vida fue dado de alta hace apenas horas y goza de buen estado de salud. De esta manera, Kimberly Mueller se convirtió en la pequeña más chiquita del mundo que logró sobrevivir (para ver las fotos haga click en ver más imágenes).Según cuenta el portal Daily Mail, Kimberly no podía ni siquiera llorar y tenía menos de una chance en mil de seguir con vida. Pero luego de seis meses de cuidados intensivos, engordó más de dos kilos y fue dada de alta.El vocero de la Universidad Clinic, de Goettingen, dijo: “Ella no es nada menos que una sensación médica”.Oliver Moeller, el especialista del corazón que atendió a Kimberly, manifestó: “Bebés tan pequeños como este no suelen tener muchas posibilidades”.“Tenemos mucha suerte de que esté viva. Nunca habíamos vivido un caso igual”, añadió.Además reveló que la bebita ya muestra reflejos básicos como agarrar con la mano y que puede llevar una vida normal.Su padre, Andreas, declaró: “No podía creer que me dejaron verla por un par de segundos después del nacimiento. Ella era tan chiquita. Yo le grité: ‘Vamos Kimberly, vas a hacerlo’”.
