"Pronto se cumplirá un año desde que me enfermé y, cuando estaba entre la vida y la muerte, expresé en la Proclama del 31 de julio del 2006: 'No albergo la menor duda de que nuestro pueblo y nuestra Revolución lucharán hasta la última gota de sangre'", dice el líder cubano, convaleciente de una enfermedad que le obligó a delegar provisionalmente sus cargos el 31 de julio del año pasado.
En su artículo, que se suma a las diecisiete reflexiones que ha escrito desde finales de marzo, Castro indica que la isla seguirá "adquiriendo el material necesario y las bocas de fuego pertinentes" para defenderse.
"Cuba continuará desarrollando y perfeccionando la capacidad combativa de su pueblo, incluida nuestra modesta pero activa y eficiente industria de armas defensivas (...). Continuaremos adquiriendo el material necesario y las bocas de fuego pertinentes, aunque no creciera el famoso Producto Interno Bruto del capitalismo", señala.
"¡Le aseguro que no tendrán jamás a Cuba!", dice Castro, dirigiéndose al presidente de Estados Unidos, George W. Bush, al que vuelve a atacar en el artículo.
El jefe de la revolución afirma, además, que la economía de la isla irá creciendo "lo necesario y lo posible".
Castro conversó en los últimos diez días con los presidentes de Bolivia, Evo Morales; Venezuela, Hugo Chávez, y Nicaraga, Daniel Ortega, en reuniones de varias horas de las que no han sido difundidas imágenes ni fotografías.
Tras cuatro meses sin imágenes de Fidel Castro, la televisión cubana difundió el pasado 2 de junio un vídeo del líder cubano en una reunión con un dirigente del Partido Comunista de Cuba. Tres días después, la televisión estatal emitió la primera entrevista concedida por el líder cubano en sus más de diez meses de convalecencia en la que se pudo ver a Castro con ropa deportiva, aspecto más saludable que en anteriores vídeos difundidos en Cuba y hablando de forma animada durante algo más de 50 minutos.
Como ya había indicado a finales de mayo en una de sus "reflexiones", Castro dijo que se dedica a lo que debe hacer, en referencia a su proceso de recuperación y aseguró que su enfermedad ya no es un secreto de Estado, como él mismo había declarado el 1 de agosto.
En su artículo, que se suma a las diecisiete reflexiones que ha escrito desde finales de marzo, Castro indica que la isla seguirá "adquiriendo el material necesario y las bocas de fuego pertinentes" para defenderse.
"Cuba continuará desarrollando y perfeccionando la capacidad combativa de su pueblo, incluida nuestra modesta pero activa y eficiente industria de armas defensivas (...). Continuaremos adquiriendo el material necesario y las bocas de fuego pertinentes, aunque no creciera el famoso Producto Interno Bruto del capitalismo", señala.
"¡Le aseguro que no tendrán jamás a Cuba!", dice Castro, dirigiéndose al presidente de Estados Unidos, George W. Bush, al que vuelve a atacar en el artículo.
El jefe de la revolución afirma, además, que la economía de la isla irá creciendo "lo necesario y lo posible".
Castro conversó en los últimos diez días con los presidentes de Bolivia, Evo Morales; Venezuela, Hugo Chávez, y Nicaraga, Daniel Ortega, en reuniones de varias horas de las que no han sido difundidas imágenes ni fotografías.
Tras cuatro meses sin imágenes de Fidel Castro, la televisión cubana difundió el pasado 2 de junio un vídeo del líder cubano en una reunión con un dirigente del Partido Comunista de Cuba. Tres días después, la televisión estatal emitió la primera entrevista concedida por el líder cubano en sus más de diez meses de convalecencia en la que se pudo ver a Castro con ropa deportiva, aspecto más saludable que en anteriores vídeos difundidos en Cuba y hablando de forma animada durante algo más de 50 minutos.
Como ya había indicado a finales de mayo en una de sus "reflexiones", Castro dijo que se dedica a lo que debe hacer, en referencia a su proceso de recuperación y aseguró que su enfermedad ya no es un secreto de Estado, como él mismo había declarado el 1 de agosto.