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El secretario de Estado sin Cartera, licenciado Miguel Mejía, denunció este domingo que el candidato presidencial del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), ingeniero Miguel Vargas Maldonado, encabezó negocios turbios con el asfalto conocido como AC30 durante la gestión del presidente Hipólito Mejía. Indicó que esas anomalías también acontecen con el negocio del gas propano, las cuales iniciaron en pasados gobiernos y persisten hasta el momento.
Asimismo, Mejía manifestó que en República Dominicana se ha formado una “fuerza interpartidaria”, integrada por dirigentes capitales de todos los partidos políticos que cambian el rostro público de acuerdo a su conveniencia. “El que está arriba no puede dar la cara del negocio, la da el que está abajo y defiende sus intereses. Manejan sus negocios en perjuicio del pueblo y del Estado dominicano de acuerdo a su dinero”, afirmó.Mejía continuó diciendo que “los funcionarios de Aerodom estuvieron involucrados en esos negocios y un diplomático que hacía gala de su investidura también participaba”. Mejía fue enfático al señalar que “un grupo tan voraz e insaciable solo puede operar en República Dominicana. “Solo aquí pueden hacerlo con ese descaro e impunidad”, dijo.El secretario de Estado sin Cartera, con asiento en el Palacio Nacional, fue entrevistado este domingo en el programa “Hablando Claro” que se transmite por Dominicanoshoy.com radio y por la emisora 1550 AM, Cadena de Azul, de Miami.
En declaraciones recientes, Mejía sostuvo que Vargas Maldonado es socio de muchas figuras importantes y altos funcionarios del actual Gobierno del doctor Leonel Fernández.
Añadió que Vargas Maldonado y Carlos Andrés Pérez hicieron “negocios y travesuras, con el manejo del asfalto RC2 de la firma Black and White”.Por otra parte, el funcionario declaró que es casi seguro que en el país hay petróleo y que tales posibilidades habrían sido determinadas por un estudio reciente realizado por expertos cubanos.Sin embargo, Mejía lamentó que el país no tenga un equipo con capacidad y potestad para dar seguimiento a los resultados de esos estudios. “Existe una institución para regular los precios de los hidrocarburos, pero no encargada de la posible explotación”.